¿Y si este verano lo recordaráis para siempre? De verdad. Sellando vuestras vivencias y creando un recuerdo imborrable que pasará a formar parte de vuestra propia historia familiar.
Te proponemos crear una cápsula del tiempo.
Cápsulas del tiempo en primera persona: basado en hechos reales
Sabemos que suena un poco peliculero. Y en cierto modo lo es. Porque esta actividad no es la típica y quizás esa sea la clave para que cause furor.
Pero, ¿sabes algo? La hemos hecho en casa y ha sido una experiencia increíble.
Tanto es así que hemos repetido.
Ya llevamos 2 cápsulas del tiempo este verano.
Cuando les propuse la actividad, mis hijos lo recibieron con mucho entusiasmo porque combinaba tareas que les fascinan como manualidades, poner en común los recuerdos que cada uno deseaba conservar y buscar un buen lugar donde enterrar la cápsula del tiempo.
Se divirtieron tantísimo, que solo unas semanas después tras una comida familiar fueron ellos mismos quienes promovieron repetir la actividad.
Esta vez con todos sus primos.
Me emociono al contarlo porque fue precioso vivir la experiencia en ese momento, y verles trabajar en equipo.
Y volverá a serlo en el futuro, cuando vayan todos juntos a reencontrarse con sus recuerdos.
La cápsula de los recuerdos: presente, pasado y futuro
Esta actividad tiene una particularidad muy interesante y es que, además, está vinculado a la idea de cuándo se experimenta una acción: pasado, presente y futuro.
En la mente de un niño o niña esto puede ser un jaleo importante porque viven en el hoy. En el ahora.
El tiempo es un concepto de lo más abstracto para los pequeños.
A veces corre rapidísimo, y en cambio hay momentos que parece que se detiene. Y el verano es un ejemplo palpable de cómo el tiempo puede moldearse a su antojo.
Pero volviendo a la cápsula del tiempo, es un ejercicio fascinante para trabajar la espera y te permitirá entablar conversaciones sobre el paso del tiempo, la memoria o el futuro.
El paso a paso para crear tu propia cápsula del tiempo en familia
Seguro que si te detienes un momento, puedes imaginar por ti misma el paso a paso para crear vuestra propia cápsula del tiempo para conservar recuerdos familiares.
Queremos asegurarnos que con la emoción no te dejes ninguno por el camino, así que hemos creado esta guía detallada:
Paso 1. Elige una caja especial
Busca una caja resistente y decorativa que será la cápsula del tiempo. Aunque puede ser una caja de zapatos o incluso una lata grande.
Nosotras buscamos una metálica, que nos pareció resistente.
- Las cajas de galletas de mantequilla, — las de toda la vida— son una opción fantástica.
Paso 2. Decora la cápsula
Dale vida a la caja, no en vano será vuestra nave para viajar en el tiempo.
- Puedes usar rotuladores de gel, pegatinas y papel de colores para decorar la cápsula.
Por cierto, no olvides apuntar la fecha presente en el exterior.
Paso 3. Selecciona objetos significativos para cada persona de la familia
Te has preguntado ya, ¿qué meterías en una cápsula del tiempo?
Piensa en objetos significativos que te gustaría guardar en la cápsula para recordar cuando la abras en el futuro.
Pueden ser juguetes pequeños, fotos familiares o cualquier cosa que te haga feliz.
¿Y si invitas a los abuelos a participar en la cápsula del tiempo?
Los abuelos deberían ser eternos. Esta experiencia nos parece un puente de unión con la memoria e incluir a los mayores de la familia lo hace aún más especial, ¿no crees?.
Paso 4. Escribe una carta para el futuro
Esta idea surgió sobre la marcha y nos pareció genial.
Toma un papel y escribe una carta para ti mismo en el futuro.
- Puedes contar cómo es tu vida ahora, qué te gusta hacer o cómo te imaginas los próximos años.
Y por supuesto, no olvides incluir la fecha en la que deseas abrir la cápsula.
Paso 5. Coloca los objetos y la carta en la cápsula cuidadosamente.
Puede ser buena idea forrar la caja, o incluso los objetos, con plástico para garantizar que se conservan a la perfección.
- Después colócalos con cariño y cierra la caja, despidiéndote hasta dentro de un tiempo.
Paso 6. Entierra o guarda la cápsula en un lugar seguro
Este paso fue uno de los más emocionantes. Buscar un lugar seguro, cavar ellos mismo el agujero y enterrar sus recuerdos es toda una experiencia.
Prepárate porque este es un momentazo. Es cuando más se agolpan los nervios y el entusiasmo.
- Si tienes jardín o terreno, parece más sencillo poder enterrarla.
- También podéis hacer una excursión a un lugar simbólico para vosotros.
- De todas maneras, si no tienes jardín no te frene. Otra alternativa es esconderla en un altillo de un armario.
Lo importante es dar con un buen escondite donde podáis encontrarla fácilmente en el futuro.
Para ello, después de cavar el agujero y enterrar la cápsula, marca el lugar exacto para que la memoria no os juegue una mala pasada y poder desenterrarla cuando pasé el tiempo.
Paso 7. Ahora viene la parte más difícil, ¡esperar!
Guarda la cápsula durante el tiempo que hayas decidido, puede ser un año, cinco años o más.
Será emocionante abrirlo cuando llegue el momento.
En casa hemos decidido abrirla el verano que viene. Aunque la intuición me dice que volveremos a crear recuerdos de esta manera tan bonita muchos años más.
La cápsula de la memoria: una experiencia con beneficios para todas las edades
Como ves, en esta experiencia en familia se combinan actividades para todos los gustos:
- Manualidades eligiendo la cápsula y decorándola.
- Lectoescritura con la redacción de una nota o carta para leerla en el futuro.
- Charlas en familia y puesta en común para llegar a consensos sobre qué guardar y cuánto tiempo esperar.
- Viajes en el tiempo. Imagina qué bonito será abrirla juntos en el futuro y revivir la experiencia.
- Buscar un escondite adecuado e incluso cavar un hoyo.
Si te gustan estas actividades para vivir el verano al máximo, te invitamos a descargarte el Cuaderno de Vacaciones de Alupé.
Un imprimible gratuito con decenas de ideas de juego y pasatiempos para entreteneros durante el verano.
Ahora sí, nos despedimos. Pero antes queremos invitarte a contarnos tu opinión en comentarios sobre este tipo de propuestas. Nos encantará que nos cuentes si te animas a ponerlo en práctica.