Las muñecas de parto y lactancia están pensadas para que cualquier niño comprenda el proceso de gestación mientras juega
Queremos adultos que comprendan con naturalidad el parto y la lactancia. Que la respeten sin tabúes. Entonces, quizá deberíamos empezar desde niños, ¿no crees?
Podemos explicar con claridad cómo llegamos a este mundo y lograr que los niños lo entiendan a través de nuestros grandes aliados: sus muñecos.
Lo decimos a menudo: los niños son capaces de comprender casi todo a través de sus muñecos porque tienen una increíble capacidad para identificarse con ellos.
En este caso, te proponemos ayudar a tus hijos a entender el proceso de gestación desde una perspectiva Montessori. Tu apoyo será una muñeca de parto y lactancia artesanal.
¿Cómo son estas muñecas?
Son muñecas de trapo, hechas a mano. Representan a una mujer embarazada y permiten al niño ver con sus propios ojos cómo nace un niño.
Por parto natural o por cesárea. A un único bebé o a mellizos.
La muñeca lleva en su interior al bebé y podemos sacarle con nuestras manos. Está representado el cordón umbilical e incluso la placenta, así que el niño puede saber con exactitud y sin tabúes cómo nació.
Después, podemos poner al recién nacido al pecho de su madre. ¿Qué mejor manera de interiorizar la importancia de la lactancia y del contacto piel con piel?
Si lo asimilamos desde pequeños, no será necesario reivindicar nada en la edad adulta.
No hay nada más natural que el embarazo, el parto y lactancia. Y podemos tratarlo así con nuestros hijos, sin tabúes ni cigüeñas.
Perspectiva Montessori
Decimos que estas muñecas están inspiradas en la pedagogía Montessori porque con ellas podemos explicar a nuestros hijos la realidad tal y como es.
Montessori recomienda prescindir de la fantasía con los niños pequeños, porque no son capaces de distinguir aún entre la realidad y la ficción.
Y se confunden.
Esto afecta a los cuentos, por ejemplo, pero es aplicable a cualquier cosa que queramos explicar a un niño.
- Deberíamos plantear situaciones reales, sin elementos mágicos.
- Apoyarnos en dibujos o muñecos realistas, muy próximos a aquello que queramos contar.
- Y explicárselo con palabras llanas, sin demasiado adorno.
Estas muñecas artesanales de parto y lactancia nos permiten seguir ese criterio.
Los niños son capaces de entender casi todo si sabemos contárselo. Y sus ojos no tienen prejuicios ni tabúes.
Al menos, no los tienen todavía.
Y está en nuestra mano que entiendan para toda su vida que la gestación, el parto y la lactancia es el proceso más natural del mundo. Todos hemos pasado por él.
Si comenzamos por el principio, por nuestros niños, estaremos más cerca de que el parto y la lactancia respetada sean batallas ganadas en el futuro, ¿no crees?