Árbol musical 32cm

Sólo hay que colocar la bola en la copa del árbol y dejar que la gravedad haga su trabajo.

Las notas musicales os envolverán.

Escuchando cómo la bola va cayendo y resonando al golpear cada lengüeta de color, los niños toman conciencia de un elemento fundamental en su desarrollo: el ritmo.

A través de él, comprenderán el lenguaje.

• Facilita la comprensión de conceptos espaciales.
• Estimula el oído.
• Entrena la discriminación de colores.
• Es una forma natural de acercarse a la música.

Éste es el modelo de 32 centímetros. Si lo prefieres más grande, escoge el árbol musical de 47 centímetros.